
Autor: CERES


FORMULARIO DE INSCRIPCIÓN: https://forms.gle/Tmw3SKUihsYLa2G16


La dictadura de lo cotidiano. Reflexiones de una mujer rural.
Hoy he bajado al banco. Tenía que pagar el recibo de la comunidad de vecinos y también a la comunidad de regantes. Me he encontrado con una amiga que me ha invitado a café. Allí hemos hablado de la posibilidad de apuntarnos a las clases de aquaerobic para los dos meses de verano. No sé si podré. La mujer que cuida a mi madre se va de vacaciones y tendré que estar todo el mes de julio yendo a hacerle la comida, la limpieza y estar más pendiente que durante el curso. Hemos dejado para más adelante la decisión.
Corriendo, he subido a casa a preparar la comida parando por el camino a comprar algunos enseres que necesitaba de cocina. Mientras se hacía el potaje, he dejado limpios los baños y también me he hecho la cena. A las 13:50 he salido corriendo a recoger a los niños al cole. Esta tarde tienen atletismo y conservatorio en la capital. Después de comer se han puesto con los deberes y yo a preparar meriendas para coger el bus a las 17 horas.
Mientras los niños están en sus tareas yo he aprovechado el rato en la biblioteca para pasar el acta de la última junta directiva de mi organización agraria a limpio porque mañana tengo que enviarla. Soy la secretaria desde hace 4 meses. Al volver al pueblo en bus hemos ido repasando el examen de mañana, hemos cenado y, con mi último aliento, he llamado a mi madre a ver qué tal está. Ni siquiera he mantenido una conversación digna con mi pareja. En el sofá, rendidos, nos hemos dado la mano mientras veía 20 minutos de una serie donde me he quedado dormida. Mañana será otro día.
Hoy, 8 de marzo, me levanto con la radio como siempre mientras tiendo la lavadora mañanera, preparo meriendas, plancho ropa para el trabajo de mi pareja y contesto al whatsapp de la ejecutiva de mi organización agraria donde los compañeros me felicitaban por el día de la mujer. Les comento que no se trata de ningún día de fiesta sino de reivindicación y algo me congela el corazón y me hace subir el volumen de las noticias. Una mujer política ha declarado que las mujeres lo que tenemos que hacer es salir a trabajar y demostrar que somos iguales que los hombres y estamos capacitadas para hacer las mismas tareas y así es como se conmemora el día de la mujer. Entonces, yo, invisible ante la sociedad, me he puesto un coletero violeta y me he declarado un año más en huelga por el 8 de marzo. Me voy a la asociación de mujeres de mi pueblo con otras “histéricas” como yo a hacer ruido y visibilizar esta impotencia muda que cuando estamos solas y aisladas nos hace ser pequeñitas. Porque digo yo, a ver hoy quien hace las labores administrativas del campo, quien recoge la casa, quien atiende a los niños y quien asiste a mi madre mientras yo estoy en huelga. ¿Quién sostiene este pueblo de 2.000 habitantes?, ¿las mujeres, los hombres, todos y todas en comunidad y reconociendo nuestro papel, el Estado o el Plan Estratégico de la PAC y el Reto Demográfico?. Antes de apagar la luz después de un día de emociones, declaraciones, sororidad, empoderamiento y manifestación me he dado de bruces una vez más con la realidad. Una carta del banco me deniega el crédito que he solicitado para poner en marcha un proyecto de emprendimiento aprovechando unas naves agrícolas que heredé de mis padres. Al ser mayor de 45 años tampoco puedo incorporarme al campo como joven. No sé dónde voy a encontrar ingresos propios más allá de las pocas hectáreas familiares que gestiono de almendros. Pero bueno, estamos en el camino. La lucha rural será feminista… o no será.
Inmaculada Idáñez

Consulta el espacio dedicado a la Violencia de Género en nuestra web: https://ceres.org.es/violencia-de-genero/

Con 29,6%, frente al 15% general, las encuestadas declaran que se dedican al trabajo doméstico no remunerado, fruto de la marcada segregación de roles por género que aún pervive en la España rural.
Madrid, 14 de octubre de 2022. Los datos son claros. El propio ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación señala en la publicación “Diagnóstico de la Igualdad de Género en el Medio Rural” una preocupación por el número de mujeres en situación de inactividad de entre 20 y 64 años. Con un 29,6% ( frente al 15,4% de la tasa general), las encuestadas declaran que se dedican al trabajo doméstico no remunerado lo que es fruto indiscutible de la muy marcada segregación de roles por género que pervive en el medio rural. Por tanto, no sólo se necesitan puestos de trabajo y medidas para activar las oportunidades de empleo en el medio rural para las mujeres. Se necesita una transformación profunda de nuestra cultura y un sistema estructurado de apoyo a los cuidados básicos que permita la corresponsabilidad de los mismos entre todos los pilares de nuestra sociedad. “Las mujeres ya hemos despertado a la realidad de nuestros derechos y exigimos un Estado que nos permita desarrollarnos como seres humanos íntegros en todos los ámbitos de nuestra vida. El 15 de octubre es un día para homenajear a todas las valientes que, pese a los estereotipos, la cultura, la historia y las situaciones geográficas, somos capaces de sostener la vida de los pueblos”, ha subrayado Inmaculada Idáñez, presidenta de CERES.
El Plan Estratégico de Igualdad entre Mujeres y Hombres aprobado por el Gobierno en este año señala como eje 2 una economía para la vida y reparto justo de la riqueza apuntando como actuaciones y medidas interesantes, tales como el desarrollo de estrategias para la inserción de perspectiva de género en las políticas públicas de activación de empleo y acciones de desarrollo de un itinerario personal e integrado de acciones de orientación, asesoramiento y formación ajustado al perfil de empleabilidad de las mujeres de áreas rurales y urbanas de forma que el 35% de los itinerarios indicados se orienten a competencias y empleos verdes y el 35% de los itinerarios se orienten a competencias y empleos digitales para lograr la inserción profesional de, al menos, el 20% de las mujeres que los finalicen.
“Todas las medidas y presupuestos son bienvenidos y la transversalización del género es más que necesaria si de verdad queremos transformar nuestra sociedad, pero se debe tener en cuenta las especificidades el medio rural”, añade Idáñez. Además, una de claves está en el cambio hacia otras economías más sostenibles socialmente. Los datos nos avalan: en nuestra jornada estatal celebrada los pasados días 5 y 6 de octubre en Agaete, Gran Canaria, nuestras conclusiones apuntaban principalmente a:
- Implicación de los poderes públicos y del personal que atiende de forma directa a las mujeres del medio rural en el acercamiento de las ayudas, servicios y oportunidades que ya existen reconocidas en políticas como el Plan Estratégico de Igualdad.
Las mujeres que tienen inquietudes para emprender, diversificar explotaciones agrarias o invertir encuentran falta de motivación por parte del personal de las administraciones que deberían alentarles y acompañarles. Entre las dificultades, la falta de acceso al crédito.
- Nuestro sector económico está pensado para ser rentable a gran escala y no a pequeña escala. En un país en el que el que más del 50% de las explotaciones tienen menos de 5 Hectáreas y de estas explotaciones, el 57,8% son con titularidad de mujeres, está claro que promover la igualdad de género, el acceso al empleo y las oportunidades de las mujeres en el campo pasa por organizar la cadena alimentaria para que nosotras podamos dar de comer a nuestras vecinas. Son muchas las experiencias de éxito alrededor de las cadenas cortas que tienen rostro de mujer pero aún queda mucho por hacer en todas las explotaciones convencionales que sólo viven para pagar préstamos para sacar adelante las cosechas. “Si las explotaciones de menos de menos de 25Ha de Valor Añadido Neto sólo pueden sostener un salario ¿de dónde se va a poder promocionar y promover la titularidad compartida de las explotaciones agrarias?. El error no tanto está en esta ley sino en las leyes del mercado, en la importancia que se le da a la alimentación en nuestra escala de valores como sociedad y en la organización de las producciones agrícolas”, insiste Idáñez.

LUGAR: AGAETE, GRAN CANARIA
FECHAS: 5 Y 6 DE OCTUBRE 2022
Programa: http://coag.chil.me/download-file/104758-419443
Formulario de inscripción para asistencia EN LÍNEA: https://forms.gle/tzw7nC6AtzVt5z2V7
De acuerdo con lo establecido en el REGLAMENTO (UE) 2016/679 DEL PARLAMENTO EUROPEO Y DEL CONSEJO de 27 de abril de 2016 relativo a la protección de las personas físicas en lo que respecta al tratamiento de datos personales y a la libre circulación de estos datos (RGPD), se informa a la persona interesada que sus datos personales serán tratados por CONFEDERACIÓN CERES con NIF G-81715393 y domicilio en C/ Agustin de Bethancourt, 17-8ª, C.P. 28003. Madrid con la finalidad de gestionar su participación en la actividad formativa. Al tratarse de una actividad subvencionada, sus datos personales serán comunicados al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación con la finalidad de justificar dicha subvención en cumplimiento de la Ley 38/2003, de 17 de noviembre, General de Subvenciones.
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Un estudio de la D.G. Desarrollo Rural, Innovación y Formación Agroalimentaria, editado por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación.